COMENTARIO
“Los dueños de las fábricas, ansiosos
por mantener en funcionamiento sus máquinas día y noche mientras la industria
fuera próspera, ocupaban a hombres, mujeres y niños en jornadas de trabajo de
doce a dieciséis horas, de día y de noche.
Cuando comenzaba un período de dificultades económicas con baja en las ventas, los empresarios no dudaban en deshacerse de la fuerza de trabajo: despedían a muchos trabajadores, ya que en la puerta de la fábrica una larga fila de desocupados esperaba el momento en que los propietarios de las fábricas decidieran poner nuevamente en funcionamiento sus máquinas.
Cuando los patronos querían aumentar la producción hacían trabajar más duramente a sus trabajadores. Cuando era necesario reducir la producción, despedían a un número determinado de trabajadores o contrataban personal eventual para que trabajara sólo unas cuantas semanas o meses a cambio de sueldos miserables.
Las jornadas diurnas y nocturnas, absurdamente largas, deben haber provocado una disfunción en la eficacia de los trabajadores; durante algunas de estas interminables horas, el trabajo debe haber dado resultados negativos en vez de positivos”.
Cuando comenzaba un período de dificultades económicas con baja en las ventas, los empresarios no dudaban en deshacerse de la fuerza de trabajo: despedían a muchos trabajadores, ya que en la puerta de la fábrica una larga fila de desocupados esperaba el momento en que los propietarios de las fábricas decidieran poner nuevamente en funcionamiento sus máquinas.
Cuando los patronos querían aumentar la producción hacían trabajar más duramente a sus trabajadores. Cuando era necesario reducir la producción, despedían a un número determinado de trabajadores o contrataban personal eventual para que trabajara sólo unas cuantas semanas o meses a cambio de sueldos miserables.
Las jornadas diurnas y nocturnas, absurdamente largas, deben haber provocado una disfunción en la eficacia de los trabajadores; durante algunas de estas interminables horas, el trabajo debe haber dado resultados negativos en vez de positivos”.
-Deane-.
RESOLUCIÓN
El texto propuesto para comentar es una serie de explicaciones
sobre el trabajo en tiempos pasados, el abuso que había por parte de los patrones
hacia la sociedad menos afortunada la cual no podía tener una vida plena y
buscaba lo que fuese para salir hacia delante.
El tipo de texto es narrativo, ya que informa sobre los
desajustes económicos y sociales que había en Gran Bretaña, el autor se hace
llamar Deane, está dirigido a una amplitud de personas, con una finalidad
pública con el fin de captar la atención de las personas.
El tema central del texto es la forma de abusar de la
sociedad, tanto hombres, mujeres e incluso niños para incrementar su escalafón
económico, dándoosle igual el trabajo que realizarán, y las horas que impartieran
sobre él, solo tenían el objetivo de prosperar su presente y futuro, los
patrones, es decir, los jefes se aprovechaban de miles de personas, para
regentar el oficio que les acataban, trabajando duro constantemente para sacar
un mísero salario, cuando les beneficiaba tener trabajando a mucha gente a
pesar de su déficit actividad, no daban abasto para contratar, pero cuando
veían que les sobraban los despedían sin ninguna piedad, ya que sabían que en
esos tiempos que corrían, la gente estaba a la espera de encontrar un trabajo
aunque fuera mínimo.
La
Revolución Industrial fue una serie de cambios económicos y sociales, una transformación
del trabajo y de la forma de pensar de la gente, lo que cambio la estructura de la
sociedad, esta revolución comenzó en Inglaterra en el siglo XVIII y
posteriormente se extendió hacia otros países, como Francia, Alemania, Estados Unidos, Bélgica, y con mayor retraso, en Rusia y España,
la industrialización que se produjo en estos países trajo como consecuencia la revolución
agrícola y demográfica, que produjo un éxodo rural; el antiguo agricultor se
convirtió en obrero industrial. La ciudad industrial aumentó su población como
consecuencia del crecimiento natural. La carencia de habitaciones fue el primer
problema que sufrió esta población marginada socialmente; debía vivir en
espacios reducidos sin las mínimas condiciones, comodidades y condiciones de
higiene. A ello se sumaban largas jornadas de trabajo, que llegaban a más de 14
horas diarias, en las que participaban hombres, mujeres y niños con salarios de
miseria, y que carecían de toda protección legal frente al mandato de los dueños
de las fábricas. Aún así la sociedad de Gran
Bretaña y otros países se vio multiplicada.
En mi
opinión el trato que había en esa revolución por parte de los jefes, hoy en día
también se da, solo que en esa época la justicia era mínima y no consideraban
el abuso a las personas, y sobretodo a los menores, lo que ahora la forma de
trabajo está muy vista y sobrevalorada, están muy pendientes en llevarla recta
y estrictamente.
Explotación infantil:
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